Helados Tortosa, una de las heladerías más queridas y tradicionales de Zaragoza a desde 1935, ha ampliado su propuesta con un nuevo espacio en el barrio de Miralbueno. Se trata de Tortosa Urban Café, una evolución del concepto clásico de heladería que fusiona la artesanía del helado con una oferta gastronómica más amplia y versátil.
Ubicado en Camino del Pilón, 61, este establecimiento está gestionado por la chef heladera Noelia Gericó, quien ha sabido mantener la esencia de Helados Tortosa mientras da un paso hacia la innovación.
Los helados artesanos, elaborados cada día en su propio obrador y con ingredientes de primera calidad, siguen siendo el alma del proyecto. Se ofrecen opciones sin gluten, sin lactosa, sin azúcar y veganas, así como una rotación constante de sabores, con más de 150 variedades a lo largo del año. Entre los más populares destacan la leche merengada, el limón, el chocolate, y propuestas más creativas como sojanuez, milhojas o cabrales con nueces.
Pero Tortosa Urban Café va más allá del helado. El espacio también ofrece tapas, raciones, vermuts y cócteles, lo que permite disfrutarlo a cualquier hora del día: desde desayunos y aperitivos hasta meriendas y copas nocturnas. Todo en un entorno moderno, acogedor y pensado para el disfrute de toda la familia.
Con esta nueva etapa, Helados Tortosa se consolida como un referente gastronómico en Zaragoza, manteniendo su compromiso con la calidad, la sostenibilidad y la tradición, a la vez que se adapta a las nuevas formas de consumo. Miralbueno, un barrio en constante crecimiento, acoge con entusiasmo este nuevo espacio que une historia, sabor y comunidad.
Dirección: Camino del Pilón, 61