Morata de Jalón, situada a poca distancia de La Almunia de Doña Godina y rodeada de fértiles huertas, es un destino ideal para los amantes de la naturaleza, la historia y el deporte al aire libre. Esta localidad, a solo 65 kilómetros de Zaragoza, se ha convertido en un punto de encuentro destacado para los escaladores debido a sus excelentes vías y a su proximidad con la ciudad.
Paseando por las calles de Morata de Jalón, podrás descubrir joyas arquitectónicas como el Palacio de los Condes de Argillo, una construcción barroca del siglo XVII que se asemeja a los palacios italianos y destaca por su elaborado alero decorativo. Cerca del palacio se encuentra la iglesia de Santa Ana, también de la misma época, que añade un toque histórico a la visita. Otra curiosidad del pueblo es el pequeño museo de objetos cotidianos de antaño, creado por Julio López, que reúne una interesante colección de piezas que reflejan la vida en la región durante los últimos cuarenta años.
Morata de Jalón es un destino de referencia para los aficionados a la escalada. Las paredes rocosas cercanas al río Jalón ofrecen más de 600 rutas distribuidas en casi una treintena de sectores, que varían en dificultad y características, desde rutas cortas y explosivas hasta largas y desafiantes, con desplomes y acrobacias. Estas rutas se han equipado cuidadosamente para garantizar la seguridad de los escaladores, convirtiendo a Morata de Jalón en una verdadera escuela para escaladores aragoneses y de comunidades vecinas.
Este auge en la escalada, especialmente tras la medalla de oro de Alberto Ginés en los Juegos Olímpicos, ha llevado al Ayuntamiento a construir un albergue para los numerosos visitantes que llegan atraídos por estas paredes. Además, la Federación Aragonesa de Montañismo (FAM) colabora en la gestión del albergue, aprovechando su experiencia en refugios de montaña.
Más allá de la escalada, Morata de Jalón ofrece otras actividades al aire libre. Las rutas de senderismo te llevarán a lugares impresionantes como las Cuevas del Sordo y de las Grajas, el Barranco de Villota, o las cimas de la Peña San Juan y el Sillón del Rey. Además, el pintoresco paisaje del río Jalón proporciona un entorno ideal para disfrutar de la naturaleza en su estado más puro.
Para los que prefieren explorar el patrimonio local, Morata también cuenta con la Casa de la Escucha, famosa por su curioso efecto acústico, y el imponente Puente de Capurnos sobre el río Jalón. Estos sitios, junto con la iglesia de Santa Ana y el Palacio de los Condes de Morata, completan un recorrido cultural enriquecedor.
En definitiva, Morata de Jalón es una opción excelente para una escapada llena de aventura, historia y paisajes espectaculares, todo a un paso de Zaragoza.