Al cumplirse el primer mes desde que se pusieran en marcha los trabajos de demolición de La Romareda, la presidenta de la sociedad La Nueva Romareda y alcaldesa de Zaragoza, Natalia Chueca, ha visitado la evolución de estas labores acompañada por la vicepresidenta del Gobierno de Aragón, Mar Vaquero, el director general del Real Zaragoza, Fernando López, y el gerente de la Sociedad La Nueva Romareda SL, Martín Fuica.
La ejecución de esta primera fase, denominada 1A, mantiene, tal y como ha explicado Chueca, un buen ritmo de ejecución y ha obtenido ya diferentes hitos en la consecución de los derribos que cuentan con un presupuesto total de 3,1 millones de euros. Desde que el pasado 8 de julio comenzó el movimiento de maquinaria alrededor del estadio, se han producido avances conforme a lo planificado por la UTE OHLA-Deltapunt 3000.
La antigua gerencia de Urbanismo ya está demolida, con la retirada de escombros y limpieza de la zona en curso para permitir la continuidad de otros trabajos y el acceso de los aficionados al campo.
Las gradas del Fondo Sur están en pleno proceso de demolición, comenzando por la zona superior hacia las localidades más cercanas al césped, con una estimación de 6 a 8 semanas para su conclusión. Los trabajos de retirada de amianto de la cubierta incluidos en esta fase han concluido con éxito.
El edificio de El Cubo comienza hoy mismo su demolición, lo que conlleva el corte del tramo de la calle Jerusalén hasta el Paseo de Isabel la Católica.
A las acciones concretas en esta ejecución sobre la estructura del actual estadio, se suman otras necesarias para el buen desarrollo de la competición y la normalización en el entorno del campo. Durante estas semanas los trabajos también se centran en delimitar la zona de seguridad para que la zona utilizable del estadio, tanto en el exterior como en el interior cuando se jueguen partidos, esté perfectamente señalizada y se minimicen las afecciones a los seguidores que asistan al partido.
Natalia Chueca ha recordado que “cumplir con el trayecto previsto cobra aún más importancia porque Zaragoza ya es oficialmente una ciudad sede del Mundial 2030” algo que, ha dicho, “nos convierte en responsables directos del éxito de este proyecto nacional. Estamos preparados, ilusionados y tenemos los mejores mimbres para aportar una sede y un entorno acogedor y atractivo para los aficionados de todo el mundo en el año 2030”.
Los plazos de ejecución, actualmente, permiten afrontar con garantías los avatares que pueda deparar el calendario en los próximos meses. De momento, el mes de septiembre supondrá un cambio de ciclo tras las demoliciones ya que se pondrán en marcha las primeras acciones del plano constructivo: la excavación del sótano, la cimentación y la creación de muros de contención.