La Calle Sobrarbe es la vía de entrada al Arrabal, que abraza al paseante en el momento en que cruza el puente de Piedra en dirección a la margen izquierda. Su corto recorrido, de norte a sur, tiene aproximadamente 600 metros.
La Calle Sobrarbe tiene sus orígenes en el siglo XVI aunque, anteriormente, se tiene conocimiento de que desde el siglo XII ya existía población en este entorno desde que en la época musulmana surgieron los arrabales, extramuros de la ciudad.