A escasos metros del Paseo Independencia, Vinopremier Zaragoza se ha consolidado como un punto de referencia para los apasionados del vino. Su enfoque innovador ha transformado la forma de vender vino, combinando a la perfección la experiencia en tienda física con una potente plataforma online. Muchos visitantes que llegan desde otras ciudades consideran esta vinoteca una parada obligatoria para descubrir algunas de las mejores etiquetas del país.
La esencia de Vinopremier se basa en un marketplace online con más de 4.500 referencias, que ofrece a los clientes una amplia gama de vinos cuidadosamente seleccionados. La propuesta está especialmente pensada para quienes desean profundizar en el conocimiento vitivinícola y descubrir proyectos singulares y bodegas con carácter. Aquí no predominan los vinos de gran distribución, sino pequeños productores y elaboraciones artesanales, con gran personalidad, calidad contrastada y precios accesibles.
Al frente de este espacio está Víctor García, quien abrió la vinoteca hace cinco años. Tras una larga trayectoria como director comercial en el mundo cervecero decidió dar un giro profesional movido por su verdadera pasión: el vino. Fue durante la pandemia cuando surgió la oportunidad de crear este proyecto propio, con el respaldo de Vinopremier Madrid pero con identidad y estilo propios en Zaragoza.
Desde entonces, la dedicación y el entusiasmo han sido clave para construir una experiencia diferencial en la ciudad. El perfil de sus clientes es muy variado, desde amantes del vino locales hasta visitantes internacionales que descubren el local a través de redes sociales y recomendaciones online. Aunque el catálogo es amplio, el enfoque está claramente en el vino nacional, con fuerte presencia de bodegas aragonesas, además de etiquetas de Rioja, Ribera del Duero, Bierzo, Jumilla, Priorato y muchas otras regiones españolas.
Uno de los pilares de la experiencia en Vinopremier son las catas de vino. Se organizan dos tipos principales. Por un lado, las catas con bodegas invitadas, que se celebran al menos dos jueves al mes. Durante unas dos horas, se realiza una presentación en profundidad de los vinos de esa bodega, acompañada de ibéricos, y todo por un precio de 20 euros por persona. Por otro lado, están las catas de iniciación, pensadas para quienes desean introducirse en el mundo del vino. Se comparan estilos, regiones, o incluso se exploran otras bebidas como cervezas artesanas, vinos de Oporto o vermuts. Estas experiencias incluyen degustaciones de quesos, tapas o ibéricos.
Dirección: Calle de Jerónimo Zurita, 3