Caminando por la calle del Temple, se abre a la derecha la calle del Olmo, en la que se encuentra el descuidado ábside de la iglesia de Santa Isabel de Portugal, cuya fachada principal da a la plaza del Justicia.
De hecho, todas casas de la manzana de la derecha de la calle del Temple (donde se encuentra La Cucaracha, el Corto Maltés…), son medianiles con la Real Capilla de Santa Isabel, construcciones realizadas en serie a finales del siglo XVIII y reformadas en el siglo XIX.
En la calle del Temple, a la altura del número 20, se encontraba la iglesia dedicada a Santa María del Temple, derribada en el año 1860 tras ser abandonada en la desamortización de 1835.
En 1991 se realizaron excavaciones arqueológicas en la zona, confirmándose que la planta de la iglesia era circular y que su acceso principal estaba en la Calle del Temple. En la actualidad todavía se conservan algunas de sus dependencias construidas en el siglo XIV, que son utilizadas de almacén.
El cuartel principal de la orden de los Caballeros del Temple se encontraba en la esquina de las calles Temple y Contamina.
Su presencia en la zona se remonta al año 1143, fecha en la que el rey Ramón Berenguer IV y el Maestre General del Temple Hugo de Paganis llegaron a un acuerdo por el que la orden renunciaba a los derechos que por el testamento de Alfonso I el Batallador les correspondían sobre la Corona de Aragón.
Entre las propiedades que recibieron a cambio de su renuncia, una se ubicaba en la actual calle del Temple. El edificio del Temple resistió en pie hasta 1886, año en el que fue demolido.
Algunas de sus antiguas instalaciones todavía se conservan en los bajos del Jardín del Temple y del Mandanga de la Buena.
Dirección: Calle del Temple esquina con Calle del Olmo