El Museo de Zaragoza, ubicado en la plaza de Los Sitios, cierra sus puertas durante los dos próximos años debido a las obras de su segunda planta. Una intervención de gran magnitud que hace incompatible con el arte y las visitas. Se van a invertir casi un millón de euros.
Durante este cierre se impulsarán las actividades en las demás sedes del Museo de Zaragoza: Museo de Cerámica/Casa de Albarracín y Museo de Etnología/Casa Pirenaica, en el Parque Grande José Antonio Labordeta, así como Museo de la Colonia Celsa en la localidad de Velilla de Ebro.
Además, también habrá muestras virtuales con el objetivo de que los ciudadanos no dejen de descubrir la pinacoteca del museo.
Las piezas más emblemáticas del Museo de Zaragoza, con especial atención a la colección de Goya, podrán seguir siendo admiradas. Eso sí, por el momento se desconoce cuándo y en qué espacios.
La duración prevista de la actuación es de 18 meses, pero el cierre se prolongará durante dos años, dado que es necesario realizar trabajos previos para la conservación de la colección del museo mientras duren las obras, y también será necesario un tiempo posterior para reacomodar las obras, revisar el discurso expositivo y montar la exposición.
El Ministerio de Cultura es el encargado de financiar la actuación, puesto que el Museo de Zaragoza es de titularidad estatal, aunque de gestión autonómica, lo que significa que el procedimiento a seguir para proteger las piezas expuestas es fruto del consenso entre instituciones.
Una de las intervenciones más relevantes será en la biblioteca del Museo de Zaragoza, una joya desconocida y que está en unas condiciones «muy apuradas». Por tanto, se trata de «dignificar» espacios a los que pueden acceder todos los ciudadanos y así ampliar y revivificar la vida del centro.
Y aunque la reforma actual es lo prioritario, la noticia de la posible ampliación del museo en la sede de la antigua Escuela de Artes y Oficios sigue en el aire.