La iniciativa de la Exposición Hispano-Francesa de 1908 surgió de la Real Sociedad Económica Aragonesa de Amigos del País y del Ayuntamiento de Zaragoza en 1902, formándose para tal efecto la Real Junta del I Centenario de los Sitios de Zaragoza.
Durante años, estuvo abierta una suscripción pública, pero según reconoció Basilio Paraiso, presidente de la Cámara Oficial de Comercio e Industria (1893-1919), fundador de la sociedad editorial del Heraldo de Aragón (1898) y uno de los principales organizadores del certamen «nada se hizo de positivo y real hasta que el Estado concedió en 1907 una subvención de 2.500.000 pesetas por intermedio del senador aragonés Segismundo Moret.»
Moret fue el incitador y patrocinador de la exposición conmemorativa del centenario de Los Sitios ante el gobierno español, que no tenía especial interés en la muestra, y ante el gobierno francés, que no quería participar y prefería centrarse en la exposición Franco Británica que ese mismo año se organizaba en Londres.
Así describe Bizén D`O Río Martinez, de la Real Academia de la Historia, el multitudinario recibimiento de la ciudad a Moret:
«Recias hileras de zaragozanos se agolpaban a ambos lados del paseo de María Agustín saludando y aplaudiendo, haciendo entrar el carruaje al llegar a la plaza de Aragón, por el andén central del Paseo de la Independencia, poniéndose en pie y saludando el señor Moret al llegar frente al monumento de los Mártires, rindiéndole en ese momento un cerrado aplauso los zaragozanos. Bajo lluvia de flores y palomas llegó al templo del Pilar, donde le esperaba el Cabildo que le acompañó hasta el camarín de la Virgen, dirigiéndose posteriormente al Hotel Regina, a cuyos balcones tuvo que asomarse para saludar a un público que le ovacionó».
El monumento a a Segismundo Moret está situado en la Plaza de los Sitios, justo al lado de la entrada al Museo de Zaragoza.