Francisco Vitoria es una de las calles más céntricas y concurridas de Zaragoza, que se extiende desde San Ignacio de Loyola hasta el Camino de las Torres, atravesando León XIII y San Vicente Mártir.
Cronistas nacionales y extranjeros la han descrito desde sus orígenes como «una de las calles más animadas de Zaragoza». Aún hoy mantiene esa esencia, repleta de establecimientos minoristas, restaurantes, bares, hoteles, galerías de arte, bancos y farmacias que forman parte de la vida diaria de la ciudad.
En el número 5 se encuentra Marengo, un local con encanto y cocina mediterránea fusionada con guiños japoneses y peruanos. Platos como gua bao, tataki de atún rojo, wok de solomillo o entraña argentina conquistan a los comensales, siempre con producto fresco y de temporada.
En el número 16, Riskomar es un clásico para los amantes del marisco. Langostas, bogavantes, gambas y cigalas frescas son protagonistas, destacando el arroz con bogavante, bacalao rebozado y tronco de merluza al Orio.
El número 19 alberga El Churrasco, un restaurante que reinterpreta la gastronomía española con recetas tradicionales, decoración vintage y un ambiente acogedor ideal para pasar un rato animado.
En el número 14, Hamburguesería Grossery’s es una referencia en Zaragoza por sus recetas caseras, carnes de calidad y salsas artesanas.
Muy cerca, en el número 25, San Güich ofrece bocadillos gourmet únicos, como el croque monsieur gratinado o la baguette de 5 cereales con mortadela de pistacho.
El 28 alberga Nola Gras, un restaurante inspirado en la cocina criolla y cajún de Nueva Orleans, con jazz en el ambiente y platos sorprendentes.
En el número 30, Goiko Grill trae hamburguesas con sello vasco-venezolano, desde tequeños hasta la famosa hamburguesa Threeler de tres niveles de carne.
En el 26, La Marula combina producto aragonés y recetas creativas a buen precio, con platos como escalibada con anchoas, patatas asadas con jamón o cazón en adobo.
En el número 31, Babax es la bocatería estrella de la calle, con propuestas como el bocadillo de ternasco de Aragón o el clásico bacon, queso y huevo.
Para los más golosos, la esquina con Camino de las Torres acoge la Heladería Presco, con helados artesanales de recetas italianas y gofres caseros elaborados con mantequilla de calidad, disponibles todo el año.
La Calle Francisco Vitoria es una experiencia viva en el centro de Zaragoza: una mezcla de gastronomía, tradición y modernidad. Pasear por ella es descubrir rincones únicos, probar sabores inolvidables y disfrutar de una de las arterias comerciales y turísticas más vibrantes de la capital maña.