La gastronomía italiana es mucho más que lasaña y macarrones.
Los restaurantes tratan de responder cada vez más a las exigencias del público zaragozano, que ya no se conforma con las típicas pizzas a domicilio. Burratas, rissottos y panna cottas se suman a la oferta gastronómica italiana de la ciudad, además de contar con cartas adaptadas para vegetarianos y celíacos. ¡Buon appetito!
Pomodoro El Tubo y Pomodoro Miguel Servet
Regentado por amables italianos, esta encantadora pizzería es perfecta para una cita romántica o una reunión con los amigos más cercanos.
La cocina está a la vista, por lo que puedes observar como tu pizza es preparada y horneada por las hábiles manos del joven chef Carmine. Ha seguido obsesivamente los requisitos de la Denominación de Origen napolitana -horno de leña, tiempo de cocción, harina y tomate italiano-y el resultado es una pizza superlativa y barata.
Los ingredientes son frescos, genuinos, próximos y de calidad. Además de las pizzas, en el menú hay una amplia variedad de ensaladas, calzones y deliciosos postres como la panna cotta y el tiramisú.
El local es pequeño, animado y muy, muy agradable y el servicio amable y rápido.
Direcciones:
Pizzería Pomodoro El Tubo, Calle Mártires, esquina Calle Cuatro de Agosto
Pizzería Pomodoro Miguel Servet, Calle Miguel Servet, 106
Il Buco
Si buscas un restaurante italiano en el barrio de Miralbueno, Il Buco es la elección ideal. Este acogedor local, dirigido por un dueño italiano, ofrece una carta muy atractiva con alrededor de treinta variedades de pizzas estiradas a mano, disponibles en dos tamaños, además de antipasti, risotti y una amplia selección de pastas de diferentes regiones de Italia.
En la carta también encontrarás ensaladas, delicias al horno como la lasaña de carne o los canelones de gallina y tartufo nero.
Los postres tampoco pueden faltar, con clásicos como el tiramisú, panna cotta (con o sin Nutella) y la pizza de Nutella.
Dirección: Calle Ibón de Trigoniero, 1
La Bocca
Situado en la céntrica calle Madre Vedruna, a pocos minutos del Corte Inglés de Sagasta y del Paseo de la Independencia, La Bocca es un restaurante moderno que ofrece comida casera italiana de calidad para compartir. El local es amplio y con una decoración contemporánea y cálida, con un marcado acento mediterráneo.
La carta es correcta y variada, con platos bien presentados y elaborados con productos de calidad. Entre las especialidades de la casa, el risotto de campagna con verduras y pollo parmesano, la tempura de hortalizas con ali oli de tinta de calamar, el carpaccio de ternera con alcaparras y parmesano, la bola de arroz crujiente de manzana caramelizada con nueces y gorgonzola, la hamburguesa piamontesa con provolone y la cuidada selección de pizzas (Pugliese, Campagnola y Calzone de verduras).
Dirección: Calle Madre Vedruna, 6
Pasta Nostra
Cansado de restaurantes italianos que tienen tanto de italiano como yo, es reconfortante encontrar lugares como el Pasta Nostra, un local que los cursis dirían que huele a ‘nonna’, y los no tan cursis, a cocina italiana.
Con más de veinte años a sus espaldas, el Pasta Nostra ha sabido hacer lo más difícil que se puede hacer en un buen restaurante italiano: destacar en la elaboración de pizza pero también en todo lo demás. Ante su carta se crean muchas dudas, porque todo es apetecible y está bien relatado. Lo bueno: no te pierdes en una carta con infinitos nombres.
Dirección: Calle Marqués Casa Jiménez, 8
Da Claudio Romareda y Da Claudio Montecanal
El Da Claudio nació con la idea de recrear la tipica “pizzeria d’asporto” tan característica y tradicional en Italia. Es un restaurante italiano con un único protagonista: el horno de leña. Y, como no podía ser de otra manera, la pizza (crujiente, de masa fina, con harinas integrales y larga fermentación) es el plato predominante en una carta donde también se puede encontrar recetas de pasta y suculentos entrantes a medio camino entre la gastronomía transalpina y española.
Las pizzas salen directamente de su horno de leña a la mesa, dejando un olor por toda la sala que abre el apetito con solo cruzar el umbral. Aquí no encontrarás una decoración y una vajilla de lujo, ni camareros con pajarita, simplemente podréis disfrutar de buena comida en un local acogedor y con un ambiente familiar.
Direcciones:
Pizzería Da Claudio Romareda, Plaza Carlos V, 8, C.C. Porches del Audiorama
Pizzería Da Claudio Montecanal, Avenida Ilustración, 5, Local 1
Il Principale
Il Principale se renueva y estrena nueva carta de temporada. El espacio gana en vistas y se convierte en una suerte de galería, con diferentes ambientes muy sugerentes.
Il Principale dispone de unas cómodas sillas para unas mesas bien distribuidas, a una distancia prudencial para que los comensales no se molesten, una buena iluminación y un excelente servicio.
Aquí, el chef ofrece platos de todas las regiones italianas, aunque sin imponerse fronteras, ni geográficas ni imaginativas.
Cocina tradicional italiana con ingredientes muy cuidados en un ambiente romántico y especial.
Dirección: Calle Verónica, 1 (justo detrás del Teatro Principal y del antiguo Teatro Romano)
La Delizzia
La carta de presentación de La Delizzia no podría ser más sugerente: ‘Las pizzas más top y más destacadas de Zaragoza‘. Aseguran que fusionan la tradición italiana con un toque contemporáneo, creando así platos diferentes y extraordinarios que gustan a todo el mundo, incluso a los paladares más exigentes.
En La Delizzia, la variedad de pizzas es impresionante. Desde las clásicas e infalibles, como la carbonara, que fusiona una deliciosa salsa carbonara sobre una masa gruesa recién horneada, con auténticos trozos de guanciale italiano y una generosa cantidad de mozzarella flor di latte; hasta la picante pizza de pepperoni, con este embutido como protagonista junto al tomate y la mozzarella. Ideal para los paladares más atrevidos.
Además, ofrecen otras opciones clásicas como la cuatro quesos, así como creaciones con ingredientes arriesgados como butifarra, chistorra o pimientos del piquillo.
En su carta, La Delizzia ofrece una amplia variedad de entrantes 100% italianos, como el vitello tonnato, la burrata stracciatella de Puglia con pesto genovés y tomates semisecos, frittata di mare con cebolla, gamba y bacalao, carpaccio de picaña madurada y bacalao marinado con olivada.
Dirección: La Torre Outlet, Autovía de Logroño, km. 6,5
Diavola Italiana
Aunque la mayoría de la oferta gastronómica de Zaragoza se concentra en el centro de la ciudad, barrios como Valdespartera ofrecen opciones muy interesantes.
Tanto es así que vale la pena tomar el tranvía en dirección opuesta a la habitual para visitar restaurantes como Diavola Italiana.
Con su horno de leña traído directamente desde Nápoles, pizzas artesanas y un trato excelente, este lugar te conquistará.
Dirección: Calle Desayuno con Diamantes, 37
L’Anaron
El calabrés Francesco Berardi es el impulsor de L’Anaron, una auténtica charcutería italiana situada en el Casco Histórico de Zaragoza, en la esquina de la Calle Méndez Núñez con las Vírgenes. En este acogedor establecimiento, se pueden adquirir embutidos y quesos italianos de excelente calidad, además de disfrutar de su sabor en los diversos bocadillos que se ofrecen.
L’Anaron cuenta con dos mostradores repletos de una amplia variedad de embutidos y quesos. Francesco se enorgullece de conseguir todos sus productos directamente de los productores, sin intermediarios, lo que le permite ofrecer auténticos sabores italianos que le recuerdan a su infancia.
Uno de los productos más especiales es la mortadela trufada. Además, hay otros embutidos similares a los que se encuentran en España, como la sobrasada, la panceta o el salami, disponibles tanto en versiones picantes como dulces. La oferta incluye también el guanciale, el capocollo, la mortadela con pistacho o trufa y el jamón dulce. Todo se trae de Calabria, excepto el jamón, que es de Módena, en Emilia-Romaña.
En cuanto a los quesos, L’Anaron ofrece una selección que combina curados con opciones más frescas, como la burrata y la stracciatella.
Los clientes pueden optar por comprar estos productos para llevar a casa o disfrutar de ellos en el local en forma de bocadillos, gracias a una extensa carta.
Dirección: Calle Méndez Núñez, 7