Zaragoza es una ciudad moderna, con excelentes infraestructuras que acogió la Exposición Internacional del año 2008 bajo el lema “Agua y Desarrollo Sostenible”.
Durante noventa y tres días, la capital del Ebro atrajo más de seis millones de personas y varios cientos de representantes internacionales de más de cien países.
La celebración de la Exposición Internacional de 2008 hizo posible la recuperación de las riberas del Ebro, así como sus aceras, avenidas y puentes. También transformó el meandro de Ranillas en el Parque del Agua, que constituye la mayor zona verde de Zaragoza.
Un lifting que situó a Zaragoza a la vanguardia de las capitales españolas.
Además, la Expo Zaragoza 2008 dejó en nuestra ciudad un legado de edificios y construcciones de arquitectura de vanguardia.
En la actualidad, el grueso de los pabellones de la Expo se han reconvertido en la Ciudad de la Justicia, en zona empresarial y en sedes como la de la Seguridad Social o la Consejería de Educación.
El Palacio de Congresos da también vida a esta zona, al igual que el Acuario, la Pasarela del Voluntariado, el Puente del Tercer Milenio o el Frente fluvial.
70 empresas públicas y privadas realizan su actividad en el parque empresarial de la Expo y más de 4.000 personas acuden a diario a desarrollar sus respectivas responsabilidades.
Además, el lugar donde se encontraban los pabellones de las empresas y las autonomías y el pabellón 5 se transformó en 2013 en la nueva Ciudad de la Justicia de Zaragoza. El complejo, de 65.000 metros cuadrados, se divide en dos edificios: «Fueros de Aragón» (jurisdicción Penal) y «Vidal de Canellas» (jurisdicción Civil, Mercantil, Contencioso-administrativa y Social). La Ciudad de la Justicia reúne los 62 juzgados unipersonales de Zaragoza y conlleva un movimiento diario de entre 5.000 y 6.000 personas.
Están pendientes de transformación cuatro de los cinco pabellones situados en el frente fluvial, los llamados Ebro y que popularmente se conocen como los cacahuetes por su particular forma.
Y en este caso, dos de ellos ya tienen claro su futuro como conjunto residencial de 275 pisos de alquiler asequible para jóvenes, para lo que la sociedad pública Zaragoza Expo Empresarial acaba de encargar el proyecto el proyecto a la ingeniería Idom y al despacho de arquitectura Ingennus, ambos radicados en la ciudad.
Nuestro viaje por el legado de la Expo 2008 arranca en la Pasarela del Voluntariado, que conecta los barrios zaragozanos del Actur y La Almozara. La pasarela, como el meandro, también tiene forma curva. Es como si la corriente del río o el característico cierzo que sopla en la capital aragonesa la hubieran moldeado.
Fue proyectada por Javier Manterola, reconocido proyectista de este tipo de infraestructuras y dirigió su ejecución Javier Monclús, cuya trayectoria profesional incluye una intensa labor docente. Su construcción se llevó a cabo entre 2006 y 2008.
Saborea el paseo, sin prisas, disfrutando de todas la panorámicas para hacerte una idea de lo que fue la Expo 2008.
El primer edificio que nos da la bienvenida es el Pabellón de España. Fue un proyecto del arquitecto navarro Patxi Mangado, un edificio ecológico, construido utilizando materiales respetuosos con el medioambiente y energías renovables. El edificio está rodeado de un bosque de pilares forrados de barro cocido, que creaban un microclima en su interior durante la exposición.
El Pabellón de España estaba planeado que fuese la sede del Instituto de Investigación sobre el Cambio Climático, pero por cuestiones presupuestarias fue descartado en 2013. Después se negoció para cederlo al Gobierno de Aragón y crear allí un centro de formación tecnológico. De momento, sigue a la espera.
Nuestra próxima parada es The Sonic Forest (el Bosque Sónico). Situada frente al Pabellón de España, es una instalación interactiva y multisensorial que forma parte de la serie “Instrumentos Musicales Urbanos” de Christopher Janney.
Se compone de 21 “árboles electrónicos”, esbeltas columnas de aluminio con altavoces, luces y sensores fotoeléctricos, cada una de ellas de 2,75 metros de altura y 0,20 metros de diámetro.
Tocar los árboles electrónicos desencadena una serie de eventos, desde una banda sonora de tonos melódicos, sonidos ambientales y palabras habladas o susurradas, a una cambiante paleta de luces de colores LED.
Un poco más adelante aparece lo que queda del Pabellón de Iniciativas Ciudadanas, conocido como El Faro. Fue uno de los más singulares y apreciados de la Expo 2008, tanto por su original arquitectura, basada en el empleo de materiales sostenibles y naturales, como por los intensos y apasionantes debates que en él tuvieron cabida.
Con más de 1.600 m2, era una construcción bella y funcional que había sido diseñada siguiendo los principios de eficiencia energética y sostenibilidad fomentando las tecnologías y los materiales respetuosos con el medio ambiente, madera, barro y paja. Después de la conclusión de la Expo 2008, en concreto en mayo de 2009, se procedió a su demolición.
A pesar de ello, en el solar resultante del derribo se quiso perpetuar la memoria del edificio y de los intensos y comprometidos debates que tuvieron lugar en su interior, con la conservación de su gran panémona (que se instaló sobre una estructura metálica), pero sobre todo con la creación de una plaza pública que, a través de una intervención artística múltiple, lo evocara. Dicha intervención artística fue encomendada a los ceramistas Fernando Nácher y Juan Jiménez, profesionales estrechamente vinculados con la Escuela-Taller de Cerámica de Muel (Zaragoza).
Como si estuviera flotando sobre el río Ebro, nos encontramos con el Pabellón Puente, una preciosa construcción en forma de gladiolo concebida por la prestigiosa arquitecta anglo-iraquí Zaha Hadid. Durante la muestra de 2008 trataba de concienciarnos de la importancia de la gestión inteligente del agua.
El propietario del edificio, el banco Ibercaja, está trabajando para transformar el emblemático pabellón puente en Mobility City (la Ciudad de la Movilidad), un proyecto que convertirá a Zaragoza en referente de la movilidad eléctrica y sostenible.
Muy cerca encontramos el Palacio de Congresos, un proyecto de la firma Nieto Sobejano Arquitectos. Su diseño destaca por su singularidad y asombra por su envergadura y altura. El Palacio de Congresos acoge numerosos congresos y eventos profesionales a lo largo de todo el año.
Frente al Palacio de Congresos, en la plaza Lucas Miret Rodríguez, está situada la impresionante escultura “El Alma del Ebro”(12 metros de alto y 7,5 metros de ancho), del artista Jaume Plensa.
Es una pieza única y original formada por letras blancas y que invita al espectador a reflexionar y «mirar hacia dentro» y que ha sido definida por el propio autor como «una arquitectura que protege algo muy frágil como es el alma».
Justo al lado se ubica el Espacio Hombre Vertiente. En este lugar se representó durante la Exposición de 2008 «Hombre Vertiente», una obra de teatro aéreo ideada por Pichón Baldinu y Gabriela Baldini de la compañía argentina ‘Ojalá!’. Se realizaron a lo largo de la muestra 360 representaciones: 6 pases diarios de veinte minutos de duración. Se calcula que pudieron disfrutarla más de 830.000 espectadores.
A pocos metros hay otro icono de la zona Expo de Zaragoza: el Pabellón de Aragón. Fue construido entre los años 2006 y 2008 por los arquitectos Daniel Olano y Alberto Mendo. Tiene la forma de las cestas de mimbre típicas aragonesas creada por paneles entrelazados de vidrio y micro-hormigón.
El edificio goza de una gran cantidad de luz natural en el interior. Tras finalizar la Expo, estaba previsto que el pabellón se acondicionara como sede de una Consejería del Gobierno de Aragón. Actualmente no se conoce nada más sobre el futuro del edificio.
Es el pabellón que se encuentra en peor estado exterior, está claramente vandalizado y abandonado.
Como emblema de la Expo, se levanta ante nuestros ojos la Torre del Agua, una construcción con forma de gota de agua y una fachada cubierta con cristales transparentes, destinada a acoger exposiciones culturales. Esta bellísima edificación se hace más espectacular por la noche, cuando se ilumina y se convierte en un faro que alumbra a la ciudad de Zaragoza creando una imagen irrepetible.
En su interir está ubicada la impresionante escultura colgante «Splash», de 23 metros de alto y 9 metros de ancho. La obra fue diseñada por Program Collective y desarrollada mediante fluidos y dinámicas por Pere Gifre para la Exposición Internacional de 2008. Desde que terminó la Expo de 2008, la Torre del Agua ha acogido eventos puntuales y, gracias a la asociación Legado Expo, alguna visita guiada. Su particular disposición y el alto coste de mantenimiento han impedido su reutilización.
Toca afrontar ya el tramo final de nuestra ruta por el legado de la Expo 2008. Un final para el que hemos guardado uno de sus elementos más emblemáticos: el Acuario Fluvial. Levantado sobre el corazón de la zona de la Expo, este recinto es el acuario de agua dulce más grande de Europa y tercero del mundo.
El Acuario Fluvial cuenta con 60 peceras donde se alojan más de 12.000 animales de más de 120 especies distintas de fauna fluvial característica de cada uno de los cinco ríos representados: Nilo, Mekong, Amazonas, Murray-Darling y el Ebro. El tanque central, que simboliza el agua primigenia, “Gran Río Mundo” con sus 9 metros de profundidad, más de 45 metros de longitud y 9 metros de ancho, es el mayor acuario de agua dulce del mundo.
En esta misma zona se encuentra el Puente del Tercer Milenio, que conecta el barrio del Actur con los barrios de Las Delicias y La Almozara. Es el mayor puente de arco en hormigón suspendido del mundo.
Diseñado por Juan José Arenas (Huesca, 1940) y ejecutado entre 2006 y 2008 el Puente del Tercer Milenio cierra el Tercer Cinturón, dando así continuidad a una de las vías de comunicación perimetral de la ciudad.
El tiempo no ha pasado en balde por el frente fluvial de la Expo. Aunque 14 años no son demasiados, los elementos que formaron parte de la muestra internacional en 2008 arrastran ya un severo deterioro.
La asociación Legado Expo ha denunciado en repetidas ocasiones su degradación y falta de mantenimiento y urge a las administraciones responsables que actúen para que el parque y sus intervenciones artísticas no sigan echándose a perder.